Si tienes instalados Windows y Linux simultáneamente en tu ordenador, habrás podido comprobar que, al utilizar sistemas de ficheros distintos, los documentos guardados bajo Linux no pueden abrirse desde Windows.
Para evitarte este problema y los continuos reinicios que conlleva, utiliza Ext2 Installable File System. Esta práctica utilidad te garantiza acceso total a la partición de Linux, con permisos tanto de lectura como de escritura.
El programa permite incluso acceder a los disquetes que hayan sido formateados con el sistema de ficheros Ext2.